El tortazo de Will Smith va a pasar a la historia de los momentos más polémicos de los Oscar… pero no ha sido, ni de lejos, el primero. Estrellas confundiéndose de sobre al entregar un Oscar, espontáneos desnudos corriendo por el escenario, o Richard Gere ofendiendo al segundo país más poderoso del mundo, son sólo algunas de las cosas que han sucedido ante millones de espectadores, en distintas galas de los Premios de la Academia. Aunque el tortazo de Will a Chris Rock es, quizá, el más sonoro de los 10 momentos más polémicos de los Oscar.

1 / El tortazo de Will Smith: nadie se ríe de mi mujer (salvo yo)

La gala de 2022 será recordada por el sorprendente Oscar de mejor película del año a «CODA»… y por el contundente tortazo de Will Smith a Chris Rock: uno de los presentadores del evento. Rock acababa de hacer un chiste sobre la cabeza rapada de la esposa de Smith, Jada Pinkett, diciendo que estaba lista para rodar «La teniente O’Neal 2». Al momento, Will se ha levantado de su asiento, ha caminado hasta el presentador, y le ha arreado una torta que ni Glenn Ford a «Gilda». ¿Un momento guionizado, una parte del «show»? Al volver a su butaca, Will gritaba: «saca el nombre de mi mujer de tu puta boca».

No, no era un momento guionizado. Era Will fuera de sí, porque su esposa está calva por enfermedad y no por estética (sufre alopecia). En la pausa publicitaria, Will y Jada han sido reconfortados por Denzel Washington y Tyler Perry. Y minutos más tarde, al ganar el Oscar de mejor actor principal por «El método Williams», Will Smith se ha disculpado entre lágrimas con la Academia de Hollywood… pero no con Chris Rock. Lo curioso es que, en el vídeo, se ve con claridad que en un primer momento Will le ríe la gracia a Chris. Jada no. ¿Qué ha pasado en el contraplano para que Will Smith haya salido en tromba a defender el honor de su esposa?

Vídeo sin censura del tortazo de Will Smith a Chris Rock, cortesía de «The Guardian».

En línea con el funcionamiento de la ley en Estados Unidos, la policía de Los Ángeles no actuará de oficio contra Will Smith mientras Chris Rock no presente una denuncia por agresión. Pero Rock no va a presentar denuncia: los trapos sucios de la Academia se lavan en la Academia. Aunque Will sabe un rato de trapos sucios: las palabras de Rock no parecen más insultantes que las fotos que se hizo Will Smith en su día, de juerga con Margot Robbie (mientras rodaban juntos «Escuadrón suicida»). Sí, Will y Jada son un «matrimonio abierto» (o al menos no se cansan de decirlo), pero en aquel momento no lo habían hecho público, y lo llevaban con discreción.

Los momentos más incómodos de los Oscar: las viejas fotos de Will Smith y Margot Robbie.
Si Chris Rock merecía un tortazo, ¿tú qué merecías por esto, Will?

Y si empezamos a dar tortazos por chistes de mal gusto, ¿qué tendrían que haber hecho con Seth McFarlane cuando presentó la gala de 2013? ¡Porque su canción fue otro hito para la historia de los momentos más polémicos de los Oscar!

2 / La canción de Seth McFarlane: te ví las tet…

En la gala de los Oscar de 2013 escogieron como presentador al polémico Seth McFarlane: director y guionista de «Ted» y su secuela, y fuerza creadora de la irreverente teleserie de animación «Padre de familia». Fue un intento más (y van unos cuantos) de intentar atraer al público joven a una gala que pierde audiencia en televisión, año tras año. Y McFarlane, fiel a su estilo, cantó una canción repasando los nombres de toooodas las actrices, presentes en la ceremonia, que alguna vez habían mostrado sus pechos en la pantalla. A algunas les hizo gracia; a otras, no tanto.

Seth McFarlane cantando «We saw your boobs».

Naomi Watts y Charlize Theron estarían de acuerdo en que este ha sido uno de los momentos más polémicos de los Oscar. Seth McFarlene, no obstante, cumplió objetivos: su gala fue la más vista de la década, logrando un 19% más de audiencia que la gala del año anterior. La prensa, sin embargo, no fue tan generosa, y los críticos de televisión nombraron a McFarlane «el peor anfitrión de la historia de los Oscar». No se puede gustar a todo el mundo…

3 / Warren Beatty y Faye Dunaway: abriendo el sobre que no es

En febrero de 2017, Warren Beatty y Faye Dunaway pasaron a la historia de la ignominia. La inmortal pareja de «Bonnie & Clyde» debía entregar el Oscar de mejor película del año; abrieron el sobre y, tras dudar unos instantes, nombraron ganadora a «La La Land». El equipo entero del film subió al escenario… y sólo entonces se supo que Dunaway y Beatty se habían equivocado de sobre.

Leyeron el correspondiente al Oscar de mejor actriz, que sí fue para «La La Land» (en concreto para Emma Stone) y atribuyeron a ese film el premio principal, que en realidad era para «Moonlight». Parece que Warren Beatty ya se olía que algo iba mal, viendo sus dudas en el momento de la lectura:

Y el Oscar es para «La La Land»… no, para «Moonlight»… ¡yo qué sé ya!

Tuvo que salir uno de los empleados de la Academia de Hollywood a poner orden (porque ellos sí saben quién va a ganar), el presentador Jimmy Kimmel debió sacar de su sueño a uno de los productores de «La La Land», y sobre él recayó la ingrata tarea de dar el sopapo anímico a los demás. Seguramente, mucho más duro que el que ha recibido Chris Rock.

4 / La renuncia de Marlon Brando: mejor envío a una actriz a hacer el indio

El 27 de marzo de 1973, Marlon Brando escribió un nuevo capítulo en la historia de los momentos más polémicos de los Oscar. La Academia le otorgó el premio de mejor actor principal por su (impresionante) trabajo en «El Padrino», pero Brando decidió rechazarlo.

No era la primera vez que ocurría eso: George C. Scott ya rechazó su Oscar por «Patton», un par de años antes. La diferencia es que Brando envió en su lugar a una mujer vestida de india, que dijo llamarse Sacheen «Pequeña Pluma». Su misión era rechazar el Oscar en nombre de los nativos americanos, y leer un discurso de 15 páginas que llevaba en la mano, escrito por Brando de su puño y letra. No llegó a leerlo, pero el momento fue mítico.

«Pequeña Pluma» rechaza el Oscar para «Gran Brando».

Las caras de Roger Moore y Liv Ullman, en pie junto a «Pequeña Pluma», fueron todo un poema. Y durante un tiempo, queriendo ridiculizar el momento, se dijo que la chica no era más que una actriz disfrazada, una mujer «haciendo el indio». Pero no: Sacheen era una verdadera activista, que ha seguido reivindicando la causa de los nativos americanos durante décadas. Y la implicación de Marlon Brando con ellos no tenía nada de postureo: llevaba ya años participando en movilizaciones para que recuperaran sus tierras originales.

5 / El discurso de Vanessa Redgrave: politizando la gala a escala internacional

En la gala de los Oscar de 1978, la magnífica Vanessa Redgrave obtuvo el Oscar de mejor actriz secundaria por «Julia». Y yendo todavía más lejos que «Pequeña Pluma», Redgrave aprovechó su momento para denunciar las tropelías de Israel en Palestina, con la connivencia internacional y el apoyo (o el silencio) de los poderosos de Hollywood de origen judío. Eso dijo Vanessa Redgrave, subiendo la escala de las denuncias de Sacheen Littlefeather, entre los abucheos de algunos de los presentes. Nunca nadie se había atrevido a tanto. Ni siquiera Marlon Brando.

Vanessa Redgrave, cogiendo el testigo de «Pequeña Pluma» y yendo todavía más allá.

Minutos más tarde entró el dramaturgo y guionista judío Paddy Chayefsky, ganador de 3 Oscar de mejor guión, a matizar las palabras de Vanessa Redgrave y a defender al estado de Israel. Ella, no obstante, se preocupó muy mucho de aplaudir al pueblo judío en su conjunto, y de censurar sólo a los responsables directos de las matanzas en Oriente Medio. Pero la imagen de la actriz quedó ya marcada, para bien o para mal, con el sello de «activista». Su discurso, al margen de que tenga razón (o no), quedó pues como uno de los momentos más polémicos de los Oscar.

Pero al mismo tiempo, creó escuela.

6 / Richard Gere presenta un Oscar… y arremete contra China

El 29 de marzo de 1993, Richard Gere debía presentar el Oscar de mejor fotografía (que fue, por cierto, para «JFK»). Pero siguiendo la estela de Vanessa Redgrave, y demostrando que en su caso el budismo es algo más que una pose, Gere aprovechó el momento para arremeter contra China y su política hacia el Nepal, contra los ataques chinos a los derechos humanos en el Tíbet, contra los miles de muertos y heridos en aquella parte del mundo… a la que también llegaba, ya entonces, la señal de la emisión de los Oscar. A Gere no le abuchearon como a Redgrave, pero todavía hoy el actor no puede pisar suelo chino. Menos mal que Hollywood respondió con contundencia y…

Richard Gere dando su educada (y muy budista) opinión sobre China.

…no, qué va. No respondió en absoluto. O en todo caso, respondió con contundencia ¡contra Richard Gere! El actor fue vetado a partir de entonces de las galas de los Oscar, y la dependencia de Hollywood del mercado chino no ha hecho sino aumentar. En un mundo donde «The Martian» tiene más escenas en China con actores chinos, para aumentar su impacto en la taquilla de ese país, no parece que vayan a surgir nuevos «Richards Geres» para protestar contra el régimen de Xi Jinping.

7 / David Niven y el nudista: tomándose a risa ciertas «pequeñeces»

En los Oscar de 1974, con el actor inglés David Niven a punto de presentar un premio, un nudista se coló en el escenario y lo surcó de un lado a otro, como Dios le trajo al mundo, mientras Niven mantenía la flema británica. Tras unos instantes de silencio, y obviamente sin ayuda del teleprompter, Niven improvisó una respuesta que salvó el momento con Matrícula de Honor: «Probablemente la única carcajada que desate este hombre en toda su vida sea enseñando sus pequeñeces». Uno de los momentos más polémicos de los Oscar, pero también uno de los más divertidos, ¿no?

Pues no.

David Niven y las «pequeñeces».

El momento es divertido, claro, pero dejó a las claras una preocupante brecha de seguridad en la gala de los Oscar. Si un hombre sin autorización podía entrar en la gala, colarse en el backstage, desnudarse, salir a escena y correr de un lado a otro… ¿qué habría impedido que cualquier otro llegara hasta las estrellas, por ejemplo, con un arma? Niven salvó el momento con el carisma y la templanza de una estrella del Hollywood clásico. Pero si lo piensas, el momento tuvo muy poco de divertido.

8 / Björk y los huevos de cisne: haciendo el ganso en los Oscar

La cantante Björk fue nominada al Oscar de mejor canción en la edición de 2001, por uno de sus temas para el film de Lars Von Trier «Bailar en la oscuridad». Y acudió a la gala con una vestido que ha pasado a la historia… por ser unánimente escogido como el vestido más feo de la historia de los Oscar: uno con forma de cisne, tan extravagante como la propia artista islandesa. Pero su gran momento en la gala (además de la interpretación en directo de su canción) fue su paso por la alfombra roja, dejando huevos como si fuera un cisne de verdad. Momento ya recogido, merecidamente, en nuestra lista de las 25 rarezas más divertidas de Hollywood.

Björk: haciendo el ganso con un par de huevos.

Como ya contamos en ese artículo, Björk dejó varios huevos a lo largo de la alfombra roja, convirtiendo su paseo con vestido de cisne en una auténtica «performance». Pero lo más surrealista fue, sin duda, que los guardias de seguridad de la gala iban recogiendo los huevos y devolviéndoselos a la artista, con estas palabras: «Disculpe, señorita, se le ha caído esto». Sin duda uno de los momentos más polémicos de los Oscar… pero también uno de los más surrealistas.

9 / James Franco, haciendo de James Franco

De James Franco y su afición al «Arte Invisible» hablamos también en el artículo sobre las 25 rarezas (y algunos hasta se lo han tomado en serio). Pero podríamos incluir una más en la larga lista de excentricidades de ese actor: cuando presentó los Oscar (aparentemente) fumado de marihuana. Sin gracia, sin chispa, sin interés en su propio trabajo. Comentando la gala en directo a través de sus redes sociales… y, como buen adolescente, más atento a las redes que a la realidad. Cosechando por todo ello unas pésimas críticas (más incluso que Seth McFarlane) y consiguiendo que, llegado el momento, nadie se riera de su disfraz de Marilyn Monroe.

Los momentos más polémicos de los Oscar: James Franco, sin gracia, sin chispa y sin ganas.
Anne Hathaway, sufriendo a James Franco como Marilyn Monroe.

Quizá lo peor de todo es que, además de su desidia, James Franco se atrevió también después a mostrar su enorme falta de respeto y empatía por sus compañeros. Cuando le llovieron las críticas, deslizó que la culpa del fracaso de la gala fue de su copresentadora Anne Hathaway, con la que no mostró ninguna química ni sintonía, y visiblemente incómoda junto a Franco. ¡Bastante tuvo con aguantarle!

10 / Hattie McDaniel: el peor de los momentos más polémicos de los Oscar

A comienzos de 1940, la gala de los Oscar premió a lo grande a «Lo que el viento se llevó». Y entre los galardones más merecidos estuvo el de mejor actriz secundaria, para la afroamericana Hattie McDaniel. Fue el primer Oscar de la historia otorgado a alguien de su color. Pero fue también un momento para la infamia: Hattie tuvo que pedir un permiso especial para poder asistir a una gala «sólo para blancos». Se lo concedieron, pero no pudo sentarse con sus compañeros en primera fila, sino al fondo, en una salita aparte. Y cuando le concedieron el Oscar aún tuvo, claro, que dar las gracias.

Hattie McDaniel, compostura ante la ignominia.

Habrían de pasar casi 3 décadas para que otro afroamericano se llevara un Oscar: Sidney Poitier por «Los lirios del valle», como mejor actor principal. A él sí, le dejaron sentarse con los blancos. Y después llegaron Denzel Washington, Cuba Gooding Jr, Morgan Freeman… Halle Berry… y ahora, Will Smith. En cierto modo, todos están en deuda con Hattie.

Y querido Will: ella sí que tenía motivos para liarse a bofetadas.

Author

Dr. Rumack

Volando de cine en cine desde 1975, aterrizo en "Sesión Doble" con un doble objetivo: hablar de cine, y hablar de televisión. Disfruta con nosotros, opina lo que quieras y critica lo que te parezca: todo es bienvenido. Pero por favor: no me llames Shirley.

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